La humedad ambiental adecuada para suelos y muebles de madera
La madera natural es un material muy apreciado por sus beneficios para el clima de interiores, y por ello se encuentra a menudo en suelos y muebles de domicilios particulares. Sin embargo, la madera es propensa a sufrir fisuras y grietas antiestéticas a causa de la calefacción utilizada en los espacios interiores.
A continuación le explicamos el papel que desempeña una humedad ambiental idónea para combatir estos desperfectos.
¿Cuándo y por qué se agrieta la madera?
La madera se adapta a su entorno. Según las condiciones ambientales, absorbe agua del aire o la vuelve a soltar. Si el aire está reseco, la madera pierde humedad y se forman fisuras muy finas. Cuando la humedad ambiental vuelve a aumentar, la madera se dilata cerrando estas fisuras.
Sin embargo, si el porcentaje de humedad no es suficiente durante un período prolongado de tiempo, la madera puede acabar sufriendo daños permanentes.
Consejos y trucos para el parqué nuevo
Antes de empezar a colocar el parqué, se recomienda tenerlo durante al menos 48 horas en la estancia donde va a estar instalado. De este modo, la madera se aclimata a su lugar de destino y se previenen daños a causa de una posible dilatación y contracción de la madera. Tenga la precaución de tender las lamas de parqué sobre una base plana, para evitar que se deformen. Tanto en la fase de almacenamiento previo como durante todo el proceso de instalación, la estancia debe presentar unas condiciones climáticas adecuadas. Se recomienda respetar los siguientes rangos: la temperatura de la estancia debe estar comprendida entre 18 y 23 grados; la humedad ambiental, entre el 40 % y el 60 %. Si su vivienda equipa una calefacción de suelo radiante, la temperatura no debe descender por debajo de los 15 grados ni superar los 20.
Consejos y trucos para muebles de madera nuevos
Si quiere disfrutar durante mucho tiempo de los muebles de madera que acaba de adquirir, sobre todo si son de madera maciza, debe dejar que se aclimaten gradualmente tras su montaje. Para ello es recomendable dejar abiertas las puertas y cajones los primeros días, y evitar que sus componentes se contraigan o dilaten de forma irregular. Otra medida aconsejable es colocar los muebles a unos centímetros de la pared. Esto es aún más relevante si se trata de un edificio nuevo, ya que las paredes pueden contener restos de humedad de la fase de construcción.
Una correcta ubicación de los muebles en el interior de su vivienda es esencial para lograr un ambiente agradable. A ser posible, no los acerque demasiado a la calefacción o a la chimenea, porque el calor que irradian podría resecarlos.
En resumen, sus muebles de madera salen beneficiados a largo plazo si adopta las medidas oportunas para asegurar una temperatura adecuada y una humedad ambiental constante.
Temperatura y humedad ambiental óptimas para la madera
La calefacción, el aire acondicionado y los sistemas de ventilación absorben humedad del aire interior, con lo que este acostumbra a estar demasiado seco. Si quiere prevenir la formación de fisuras y grietas en la madera, debe generar un clima idóneo durante todo el año.
Se recomienda que la humedad relativa del aire interior se sitúe entre el 40 % y el 60 % y que la temperatura oscile entre 20 °C y 23 °C, ya que en estos rangos la madera apenas sufre alteraciones. Esto significa, a su vez, que no conviene que el parqué y los muebles de madera estén expuestos a porcentajes de humedad ambiental demasiado altos o bajos.
Humidificadores de aire para suelos y muebles de madera
El humidificador de aire es un dispositivo sencillo y efectivo para mantener la humedad ambiental en un porcentaje idóneo de entre el 40 y el 60 % durante todo el año. Así le ayuda a prevenir la formación de fisuras y grietas durante la temporada de calefacción.
Además, el humidificador/purificador de aire contribuye a reducir los contaminantes presentes en el aire de su vivienda. Al tiempo que se evapora agua pura para humidificar el ambiente, se reducen de forma natural los contaminantes suspendidos en el aire, como partículas, que quedan retenidas en el agua del aparato. Es un método muy eficaz para asegurar una buena calidad del aire en su domicilio. Además, tiene un efecto beneficioso para los objetos de madera.
Criterios para la compra de un humidificador/purificador de aire
A la hora de elegir el modelo, tenga en cuenta su radio de acción y no olvide que el aparato está pensado para funcionar en una estancia cerrada.
Si las puertas van a estar abiertas, deberá sumar las superficies correspondientes a las estancias contiguas. Para no forzar el aparato y conseguir que rinda suficiente incluso estando ajustado a un nivel bajo o medio, evitando además que emita demasiado ruido, recomendamos añadir otro ⅓ a dicha suma.
Ejemplo (partiendo de una superficie de 40 m2): si las puertas están abiertas y la estancia da a otra habitación de 15 m2 , tiene que sumar ambas superficies completas (resultado: 55 m2 ). Para que el aparato no tenga que funcionar al límite de sus posibilidades, recomendamos agregar otro ⅓ a la suma anterior. En resumen, el aparato debe tener capacidad suficiente para cubrir una superficie de aprox. 73 m2.
¿Ya tiene un humidificador, y a pesar de todo no consigue aumentar la humedad ambiental?
Hay varios motivos por los que la humedad ambiental no llega a alcanzar un nivel adecuado a pesar de tener en funcionamiento un humidificador/purificador de aire. Por ejemplo, es posible que en la estancia haya mucho material natural, como parqué, muebles o libros. Si el aire estaba demasiado seco y luego se le ha añadido humedad, esta será absorbida primero por los objetos fabricados con materiales naturales. La humedad no accederá al aire hasta que no se hayan saturado dichos objetos.
Tenga presente, por tanto, que cuanto más material natural haya en una estancia, más se tardará en alcanzar la humedad ambiental óptima. Este proceso puede durar varios días cuando se pone en marcha el lavador de aire por primera vez. Tenga paciencia, pues. En estos casos, le recomendamos ajustar el aparato al nivel máximo para que la humedad ambiental aumente más deprisa.
