Un clima interior adecuado cuando se calienta con leña
Cómo evitar que el aire se seque demasiado si calienta su casa con leña y cómo prevenir un exceso de CO2 y polvo fino
A todo el mundo le apetece calentarse a la lumbre cuando hace frío fuera. El fuego del hogar crea un ambiente acogedor y hace más llevaderos los gélidos días de invierno. Sin embargo, las chimeneas y estufas de leña influyen mucho más de lo que se piensa en el clima interior. El aire enseguida se reseca y los niveles de CO2 y polvo fino aumentan. Esto no solo repercute negativamente en el clima de la vivienda: también puede perjudicar su salud. A continuación le explicamos cómo conseguir un clima perfecto en su hogar aunque tenga encendido el fuego.
El efecto de la calefacción con leña en el clima interior
Si usa la chimenea o estufa de leña para caldear el ambiente en invierno, debe prestar más atención que nunca a mantener la temperatura ideal y ventilar regularmente. La mayoría de chimeneas y estufas de leña absorben oxígeno del aire interior, porque lo necesitan para que las llamas no se apaguen. Esto implica un aumento del CO2, que debe sustituirse por aire fresco.
El calor puede hacer descender la humedad ambiental por debajo del porcentaje recomendado, del 40 al 60 %, resecando excesivamente el aire interior. Así es como surge el típico «aire de calefacción», caracterizado por su sequedad. La escasa humedad ambiental puede resultar desagradable e incluso irritar las mucosas. Además, es una de las razones por las que en invierno hay más propensión a enfermar.
A la excesiva sequedad del aire y al aumento del nivel de CO2 se suma un tercer factor: el polvo fino. Este se genera por la combustión de la madera y repercute de forma significativa en la calidad del aire y en la salud. Según la Agencia Federal de Medio Ambiente alemana, está demostrado que el polvo fino es nocivo para la salud y puede provocar asma, alergias, trastornos cardiovasculares e incluso cáncer de pulmón.
https://www.umweltbundesamt.de/service/uba-fragen/warum-ist-feinstaub-schaedlich-fuer-den-menschen
Cómo usar bien la estufa o la chimenea y reducir el peligroso polvo fino
Usted puede tomar medidas para combatir estos riesgos y reducir hasta cierto punto la emisión de polvo fino. Procure evitar errores de uso, como llenar excesivamente la estufa o la chimenea, tardar demasiado en añadir leña, encenderla mal o quemar papel de periódico. La manera de guardar la leña también es importante y puede implicar diferencias significativas. Utilice madera seca y almacénela correctamente, sin apilarla en contacto directo con la pared, por poner un ejemplo. De esta manera, la combustión generará menos emisiones. Con ello logrará reducir el polvo fino. Una solución indicada para filtrar del aire el polvo fino y otros contaminantes es instalar un purificador o un lavador de aire.
Cómo lograr cómodamente una buena calidad del aire
Nuestro lavador de aire le ayuda a conseguir un aire interior limpio y de buena calidad, para que pueda disfrutar plenamente del calor de la lumbre. Este aparato depura el aire y establece la humedad ambiental idónea. ¿Hay demasiadas partículas en suspensión, como polvo grueso o fino y motas de ceniza? ¿El aire está demasiado seco? No se preocupe: el lavador de aire reacciona en tiempo real si detecta una humedad ambiental insuficiente y una cantidad excesiva de contaminantes. En tal caso, adapta su rendimiento por sí solo para humidificar o purificar el aire automáticamente.
¿Desea elegir una de las dos funciones, purificar el aire o generar la humedad ambiental adecuada? Entonces puede recurrir a nuestros humidificadores o purificadores de aire. El humidificador le ayuda todo el año a conseguir la humedad ambiental óptima, mientras que el purificador se centra en proporcionar un aire interior limpio y puro (elimina hasta un 99,995 % de los contaminantes presentes en el aire). Si lo desea, puede equipar su purificador de aire con un filtro de carbón activo adicional. Con él se pueden filtrar olores desagradables, como los que se producen al quemar leña o briquetas de carbón, gracias a su capacidad de retención de partículas de hasta 0,0002 micras.
Consejo para mantener controlados los factores que determinan la calidad del aire:
Si quiere tener siempre a la vista distintos factores del aire interior, como la temperatura, la humedad ambiental y los niveles de CO2 y polvo fino, le recomendamos nuestro excelente medidor de la calidad del aire AirSense. ¿Hay demasiado CO2 en el aire de la estancia debido al fuego de la estufa o la chimenea? ¿Ha llegado el momento de ventilar? En tal caso, la aplicación le enviará recomendaciones de actuación. El medidor de la calidad del aire AirSense mide, supervisa y analiza los componentes del aire, el clima interior y las influencias ambientales en tiempo real y le avisa de los cambios en la calidad del aire.